Hoy no sabría por donde empezar. Hay tantos temas que merecerían unas líneas en este humilde blog... Podría decir lo que pienso sobre cómo se ha gestionado el secuestro del Alakrana, de por qué nadie se atreve a dar un puñetazo en la mesa por Gibraltar, del editorial conjunto de doce periódicos catalanes sobre el estatut, del increíble fallo de seguridad en la Casa Blanca, de la futura ley del aborto, de la vergonzosa connivencia del estado irlandés con la iglesia ocultando abusos a menores durante años, de si lo de Dubai ha sido otra burbuja, de si habrá o no partido de la selección de Euskadi este año o si la roja jugará pronto en San Mamés... Pero no, hay algo que he descubierto por casualidad esta tarde que me ha dejado completamente sorprendido por lo inesperado: ¡tengo el pasaporte caducado desde hace tres meses!
Debe ser que me hago mayor y que cada vez viajo menos, porque hasta hace un par de años esto hubiese sido impensable. También puede ser porque con el DNI se puede ir a un montón de sitios. ¿Tendrá algo que ver esta preciosidad que hace un alto en su gateo a la altura de mis pies y sonríe cuando me mira?
jueves, 26 de noviembre de 2009
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